Nuestros alumnos de 4º ESO han realizado como fin de etapa de Secundaria un viaje por tierras portuguesas desde el día 6 al 11 de mayo. Era la primera vez que nos aventurábamos en un proyecto por una geografía lusa que nos ha sorprendido a todos, tanto a alumnos como a profesores acompañantes.

Una experiencia planteada desde tres vertientes:

  • Cultural
  • Lúdica
  • Convivencional

Desde el domingo pudimos disfrutar a lo largo de seis días de un marco incomparable, Vimeiro, que nos obsequió en nuestro hospedaje con unas vistas, amén de sus magníficos servicios, enclavadas en un lugar paradisiaco donde el mar y las montañas se fundían de una forma simplemente inigualable.

Nuestras visitas culturales, históricas y monumentales comenzaron en Évora que fue el primer destino y que nos recibió entre sus murallas, como adelanto de todo lo que nos esperaba. Óbidos nos hizo recorrer su calle principal, Dureitia, que conducía a un castillo que rebosaba magia y te envolvía entre los olores de sus plantas y casas singulares. Cabo Carvoeiro nos sumergió en un mar de difícil catalogación por las vistas agrestas, y salvajes que nos regalaba.

Lisboa, capital plural, preciosa, única y llena de ambiente, Eurovisión ayudó a ello aun más, nos transportó a través de su estilo arquitectónico manuelino, a Los Gerónimos, impresionante claustro, y a esa Torre de Belem que confunde el mar con el río y que nos guio al monumento de Los Descubrimientos, que era el diseño que todos los alumnos llevaban en sus sudaderas y que fue realizado por dos alumnos de 4º.

Un mar de peces y plantas nos acogió desde ese impresionante Oceanario que encandiló a los chicos por el encanto marino que allí encontraron. Mapfra nos introdujo en su palacio-monasterio que terminaba con su monumental biblioteca. Y Sintra, maravillosa y de la que solo decir que su Palacio da Pena fue ese mundo de príncipes y princesas que confundió sus colores con lo de los ojos de nuestros alumnos que no creían lo que veían.

Pero no todo quedaba aquí, pues la parte lúdica también era importante. Tirolinas, tiro con arco y toboganes de agua, fue el despertar del primer día. Increíble como disfrutaron. Pero aún había más y el paintball los llevó a una tarde de divertimento sinigual. Y como no, el mar, el surf, en un día de iniciación a este deporte, en una de sus playas más emblemáticas, Playa de Arena en Lourinha. Y la parte convivencial ha sido todo un hallazgo de sentimientos, emociones y encuentros llenos de entusiasmo y alegría. Nuestros chicos han descubierto lo que es el trato, el compañerismo y las confidencias en un ambiente cálido y que han transmitido por todos los lugares en los que han estado y que han tenido como respuesta las felicitaciones y agradecimientos de cuántos los han conocido por su exquisito y educado comportamiento

Y si a todo esto se le une un experto y maravilloso chófer, Gabriel, a quien todos le agradecemos su conducción y su disponibilidad, para qué pedir más.
Portugal nos ha recibido de manera maravillosa y nuestros alumnos nos invita a seguir con este proyecto porque merece la pena en todos los sentidos.